miércoles, 14 de marzo de 2007

Colgados de mis entrañas

¿Alguna vez habéis sentido que un hombre se os agarra a las entrañas?

Mi madre suele llamar entrañas al útero, y lo ajusto un poco más y denomino entrañas al endometrio, que es donde se me enquilosan a mí los hombres.

Yo no me enamoro como una mujer normal, o por lo menos, soy tan ególatra y egocéntrica que pienso qu el o mío no es una forma normal. He intentado cambiar, he conocido psicólogas, psicoterapeutas, psicoanalistas y todo aquello que comienza con un prefijo tan complicado de pronunciar y no he conseguido nada. Parecía que había hecho progresos, porque mis últimas conquistas (los nombro así puesto que me duran tan poco que no puedo ni siquiera denominarlos novios, y mucho menos parejas), eran seres encantadores, que nunca forzaron mi cuerpo a tomar ninguna decisión que no desaba tomar, eran perfectos, me llenaban el móvil de fantásticos mensajes, teníamos eternas conversaciones, me regalaban flores, canciones, correos románticos, en fin... se puede decir, que se desvivían por cuidarme. Pero de esos hombres o me enamoraba, y no porque fueran buenos, me gustan los hombres buenos, sino porque empezaba con ellos porque me mimaban, no porque se me agarraran a las entrañas.

Y sin embargo, ha habido hombres, con los que no he compartido más de una o dos noches que se me han quedado anclados en la matriz. El contacto de sus cuerpos con el mío conseguía desorbitar cada uno de los centímetros de mi piel, y poco a poco, conforme las horas pasaban, se me iban introduciendo en el breve espacio que dejo entrever entre mi coraza y mi alma. Les he amado sin querer, les he soñado, los he imaginado perfectos aún sin conocerlos, porque en mi vida apliqué el contrario de más vale malo conocido que bueno por conocer. Siempre existía alguien mejor, mi mente dibujaba su alma dentro de cuerpos que yo conocía.

Esta era la historia de mi vida... ahora ya no me dejo dominar por la locura. Ya no busco al ser perfecto puesto que sé que es imposible, ya no creo en los cuentos de hadas, ni en los príncipes azules, pero sí que creo en el amor, aunque se esconda. Jugar al escondite es divertido. Sobretodo cuando aprendes a buscar el amor en otros rincones. Yo he descubierto que hay una esquinita de mi salón, donde da el sol por la tarde, que tiene un aire especial, me devuelve la vida. Allí me siento y dejo de pensar, sólo siento, siento el contacto de mi piel con la madera, con el metal del armario en el que me apoyo, el corretear de las patas de mi perro, la brisa que entra por la ventana, los diferentes olores de la ciudad, y los rayos de sol, y justo entonces me siento completamente feliz. No necesito nada más. Y con esa energía renovada, me lanzo a la calle, liviana, a pasear, y observo como va entrando la primavera en todos los entes de mi barrio, y parezco una idiota que se pasea con la sonrisa anclada en su cara.

En fin... yo empezaba esta historia hablando de hombres que se quedan incrustados en mi alma a través de mi útero, y como siempre, me he ido por las ramas. Ahora acabo con un alegato a la felicidad, y es que todo se puede unir, la sensación de un enamoramiento constante es lo que me mantiene viva, da igual que sea un hombre, dos, tres, mi perro, la lluvia, el sol, la primavera, mi casa, mi trabajo, mis amigos, la ropa recién planchada, una noche de copas y risas, o simplemente estar conmigo misma un ratito cada día.

En cada uno de los rincones de mi vida encuentro algo que se me engancha a las entrañas y me mantiene vibrante.

4 comentarios:

Unknown dijo...

Hola, buenos días,


no me preguntes cómo he llegado a tu espacio pero el caso es que aquí estoy.Digamos que he cogido un tren rápido desde el blog de un amigo que sospecho común.

Me tomo la libertad, sin presentarme ni nada, de responder a esas palabras tuyas tan puras que comparto aunque tú y yo no compartamos género.

Estos días ando revuelto porque hace muchos años que se me agarraron bien fuerte de las entrañas(yo no tengo útero, pero siento que el estómago y el corazón son uno) y creo que aún no se me han soltado.

La parte contratante que tan cogido y encogido me tiene rescindió unilateralmente su compromiso y me dejó con el mío, ese tan fuerte que es el de nuestras profundidades, ese que flota en todos nuestros barros y resiste sin hundirse. Creo que lo llaman estar enamorado.

Siento la horterada a traición pero, carajo, desde que somos pequeñitos nos preparan para resolver integrales complejísimas y distinguir el sujeto del predicado de frases imposibles mientras que seguimos amando y sintiendo como los párvulos. Y a nadie le importa. Hasta que le agarran, claro.

Bueno, bastante rollo he metido. A veces uno se siente como si acabara de comer tierra y se le escapara por un agujero enorme del pecho, como si fuera un esqueleto sólo en el tronco. Como si sólo me quedaran ya las bajas pasiones de un palmo por debajo del ombligo y la cabeza para girar como las norias.

El resto, me lo arrancaron.

Aún así, viva el mundo de la fe en el amor y en el otro lado de las cosas.

Besicos

P.D No sé si conoces el Hey,ya! de Outkast.Pedazo de canción. Pues bien, la versión acústica que ha hecho este ciudadano la supera.Espero que te guste:

http://www.youtube.com/watch?v=c-7TMHJGmMs&NR

bbells dijo...

Me encanta que comente gente que no conozco!!!

La verdad es que las entrañas son eso, entrañas, son nuestro pensamiento visceral, pasional, descontrolado. Hay que intentar entenderlo como tal. No dejarse dominar por él, al igual que debemos encontrar el equilibrio perfecto entre pasión y razón, sin irnos a los extremos.
Estar enamorado es hermoso, pero hay que saber cuándo debemos poner fin, y no sé cómo es tu historia, pero desde mi experiencia te hablo, y te digo que yo me agarré a la vida al cerrar puertas, no fui capaz de entender toda la belleza que se me ofrecía (sin focalizarla en nada concreto) hasta que fui capaz de comprender que mi necesidad de estar enamorada no implica que exista una persona, sino un sentimiento hacia MI VIDA.
No creo que te ayude, pero sigue escribiendo conmigo, me gustan los puntos de vista del otro género, y yo buscaré a ver cuál es el tren que te ha traído hasta aquí... jeje! que ahora me pica la curiosidad.

Besicos para tí también, y si necesitas un punto de vista femenino, aquí estoy.

P.D.: En cuanto tenga 5 min me meto en el link.

Unknown dijo...

(Buon giorno, gracias por tu respuesta rápida)

(¿Te has puesto ya ese pedazo de canción? ¿Pone o no pone la piel de gallina? Estoy empezando a pensar que Matt Weddle sí que tiene útero)

(Vale ya de paréntesis!)

INVENTARIO DE COSAS INÚTILES

Esta mañana mientras me duchaba he preparado un inventario de cosas inútiles.

1. Estar enamorado sin correspondencia (en todos los sentidos, porque, al margen de que no te correspondan,estás pegado al buzón, al mail y al móvil por si llega esa carta que todos hemos querido recibir alguna vez)

2. Ser un sentimental y pensar que siempre nos quedará París.Nótese que ésto es especialmente inútil para los que creemos que el amor no cae del cielo y que no escogemos amar, sino que escogemos seguir, como dice un poema que ya te mandaré.Hoy el sentimiento va y viene y los damnificados son(somos) siempre los mismos.Los sentimentales.

3. Vivir como si el día a día fuera una película de Amélie constante.El caso es que siempre hay un tío con un piercing en la punta de...que te acaba levantando al amor de tu vida...¿habrá que cambiar de senTImental a semental?¿Tendré que volver a dejarme el pelo largo y adecuarme al look canalla tan exitoso en los corazones que merecen la pena...?

4. Ser un guerrillero de la alegría.Especialmente estúpido.El personal prefiere sus conveniencias e intereses antes que hablar de la alegría, del otro lado de las cosas donde las personas sólo quieren llegar a ser felices.Ya sabemos cómo han acabado todos los guerrilleros a lo largo de la historia.

5. Oir música del tipo lonuestroesimposibleasúmelojoderlavidaesasínolaheinventadoyo.A la mierda.Tampoco es que ayude mucho la que te anima a seguir fallen in love pero...Larga vida a Stevie Wonder!!:

http://www.youtube.com/watch?v=PY45DkaP9Ls


Hay medio millón de cosas inútiles pero no quiero colapsar el servidor.

Besicos y GRACIAS INFINITAS por ese punto de vista femenino tan necesario para mí estos días

bbells dijo...

Impresionante!!! Los pelos de punta es poco... se me encoge el estómago, eso es exactamente a lo que yo llamaba el otro día engancharse a las entrañas, veo que lo has comprendido perfectamente;)
Bueno, como estoy en este estado de felicidad plena sin razón concreta y has conseguido alegrarme el día aunque te hayas puesto un poco pesimista (y no tengo muchas ganas de trabajar que digamos...), te regalo una de mis canciones de últimamente, no sé porqué me gusta, pero no puedo evitar pasarme el día escuchándola por culpa de mi tata y de esa serie de médicos que tiene enganchada a media España:
http://www.youtube.com/watch?v=zxXwIIBlSgw
Y deja de estar triste, por favor, que hay un millón de cosas útiles que pueden alegrarte el día, no sé qué te ha pasado, pero sea lo que sea... el amor va y viene y aparece siempre en la esquina de una calle escondida donde no te imaginas que puede estar, y entonces te olvidas de que alguna vez dejaste de existir. Y yo no estoy enamorada, pero estoy segura que algún día... mientras tanto aprovecho el momento.
Para el próximo día, intento prepararte una lista de cosas útiles, por llevarte la contraria un poco, que siempre es divertido.

Besicos

P.D.: Ser Amelie por un rato no está mal, la combinación perfecta es un sentimental-semental (existirá en algún sitio), y ser el guerrillero de la alegría con los pies en la tierra hace que los días sean un poco más dulces.