jueves, 15 de diciembre de 2005

Intensidades

A los 15 supe toda la verdad, que yo nací para volar, a los 18 éramos extraños…

En fin, así empieza la canción de Amaral de la que hablaba el otro día.

Subidas y bajadas, ¡llevo una racha!, un día estoy arriba y otro abajo, y en el fondo, tengo que darle la razón a “mi novia”, y es que soy una mujer de relaciones intensas, es decir, que hago amig@s enseguida, bueno, no son exactamente amigos, el caso es que me gusta mucho conocer gente, y lo hago de manera rápida, conozco a una persona, me interesa, me abro, empiezo a hablar y a escuchar sin parar, y si me gusta lo que veo, me quedo, tampoco pido una relación larga, me refiero a que no exijo que nuestra amistad sea eterna, me conformo con que si nos llevamos bien, la cosa se mantenga durante una temporada.

Recuerdo, perfectamente, el día que una compañera de piso nos dejó tiradas (a la que ha sido mi compañera de piso hasta que me independicé y a mí) de la noche a la mañana, Itz me llamó por teléfono y me lo contó y como era finales de agosto, la cosa nos corría bastante prisa, así que colgamos los carteles en Barcelona bastante rápido, al día siguiente me llaman por teléfono, un chico y me dice que ha visto el cartel en la facultad y su novia busca piso, la chica era de Zaragoza, y yo estaba en casa de mis padres estudiando para los exámenes, le dije que le diera mi teléfono, quedábamos para tomar café y así lo hice. No la conocía de nada, pero ese fin de semana cogimos el autobús juntas para Barna y nos pasamos 4 horas hablando sin parar, le enseñé el piso y se quedó, nunca discutimos, nos convertimos en íntimas, y como hermanas de la noche a la mañana. Ahora hace mucho que no hablamos, mucho, mucho, pero éste es un claro ejemplo de relación intensa y rápida. Y así soy yo. Muchas veces a la gente le gusta y se queda conmigo, otras salen corriendo, y de ésta última tengo un ejemplo de no hace mucho.

Es posible que me entregue demasiado rápido, no en cuestiones de amistad, que en este caso, más o menos me viene bien, porque la gente sabe que voy de frente enseguida, sino en esas relaciones que pasan por el dormitorio, y conste que no es en este tema en el que digo que vaya rápido (para los mal pensados). Es verdad que necesito guardarme un poco, para mantener el misterio, esto a los hombres creo que les gusta, y mi aspecto denota misterio, pero luego acabo con él bastante rápido. Me gusta ser sincera, ¡qué se le va a hacer!

No sé cuál es la mejor opción, supongo que depende del momento y de la persona con la que te encuentres. En el fondo, no me disgusta ser así, es una característica de mi personalidad que me ha hecho conocer gente maravillosa, una de esas personas es mis tata pequeña, a ella la conocí unas convivencias en el Monasterio de Monlora, nos pusimos a cantar mano a mano, y de eso han pasado más de 8 años, y seguimos siendo inseparables, o eso creo ¿no?.

También es bonito cuando algo llega suavemente, y hago referencia al post de la polilla, pero en el fondo, soy de la idea de que lo de suave no va mucho conmigo, soy más de golpes, ya lo dije una vez, me gusta encontrarme de repente, perdidamente enamorada de una persona, o sentir que he encontrado a la amiga perfecta (dígase novia) para el momento exacto que estoy viviendo (Carpe Diem). Eso sí, todo esto tiene muchos contras, y es que, a veces, te sientes sola, sin remedio y de manera imparable, simplemente sola, y entonces no sirve todo lo que tienes, porque consideras que necesitas algo estable que te haga sentir como en casa, yo ahora siento que he emigrado de mi Hogar, y me faltan cosas en la maleta que no encuentro en las tiendas de mi nueva ciudad. Entonces parece que la agenda del móvil ha decidido hacer desaparecer todos los teléfonos que tan meticulosamente habías guardado, porque muchas veces, en caso de emergencia, sientes que todos esos teléfonos no sirven para nada, porque la mitad, son de aquella gente que se ha asustado cuando ha visto tu intensidad, y la otra mitad, no han huido pero sientes que lo harán si les das un grito de auxilio, tal vez porque te consideres inoportuna, insuficientemente importante u otro millón de causas como estas.

El caso es que este post surge de un día un poco tonto, en el que me he sentido sola, y he recordado, que no es más que un producto de la vida que yo he creado y he decidido tener, así que, a aguantarse, no querías estar sola?, pues ya está, de vez en cuando, toca sufrir días tontos.

Besitos a tod@s.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Por alusiones.... ;-)
No tengo que decirte cuánto, pero cuánto de acuerdo estoy contigo en esa forma de ser. En lo maravilloso que es ver a alguien que te interesa y ponerte a hablar, a mirar, ir quitando los velos y venciendo las capas y seguir sintiendo curiosidad. Y lo bueno y enriquecedor que es desear que alguien te conozca, contar cosas sobre ti, encontrar lugares comunes sobre los que poder sentarse a tomar un café... Todo esto te da una perspectiva mucho más amplia de las cosas y de la vida, y sinceramente creo que si eres consciente de ello te hace más sabia, te abre la mente a que el mundo está lleno de realidades distintas y a aprender de ellas. Pero como todo, tiene su contrapartida. Es cierto que algunas, muy pocas veces, la persona sigue y sigue despertando tu curiosidad, y tú despiertas la suya, y estás a gusto y te quedas, porque sencillamente te parece natural continuar con ello. Esto es lo que nos ha pasado a ti y a mi, y hasta aquí (y mucho más lejos...) hemos llegado. Pero cuanta más gente llega a tu vida, más gente se marcha. Esto es inevitable. Y si eres una persona que constantemente está empezando cosas, tienes que saber que estás de paso en la mayoría de ellas, y que lo que queda es lo de siempre: tu.
Una persona que conozco (que por cierto es la imagen de la devoción y entrega a su pareja y su familia), dijo hace tiempo que libertad e independencia son igual a soledad. Y no puede tener más razón. Se puede elegir (por dibujar un mapa de los extremos) entre perderse por el mundo, vivir y disfrutar cada segundo ocupándote y respondiendo sólo de ti, o formar una familia, ser fiel y vivir con y en parte para otros. Ambas opciones pueden ser maravillosas, cuando son una opción consciente y las aceptas con sus ventajas e inconvenientes. Vivir es elegir, y eso tu lo sabes muy bien. Pero bueno, tampoco tenemos que tomar ahora todas las decisiones...
No te agobies, al fin y al cabo la tristeza también está de paso.
Y a aguantar el tirón!! ;)
(que yo estoy y estaré aquí)

bbells dijo...

Nadie sabe, cuánto te quiero guapa, y que lo nuestra intensidad dure otros 10años más... aguantando tiras y aflojas del mundo, dejando que lo que tenga que pasar pase, pasando por las calles de nuestra vida, algunas igual ponemos una baldosa, en otras símplemente miraremos los escaparates o entraremos en alguna tienda, y bueno... quizás de aquí a unos años seamos muchos más en esta historia, o menos, eso nunca se sabe.
Gracias por estar ahí. Te quiero mucho, guapa!